lunes, 20 de marzo de 2017

Uno de cada cuatro estudiantes sufre de un acoso escolar grave

Un estudio reciente en los Estados Unidos reflejó que 1 de cada 4 estudiantes desde nivel elemental hasta el superior son acosados gravemente. El 24% de los casos este acoso perdura toda la vida estudiantil. El acoso se observó mayormente a nivel elemental. Hubo estudiantes que pudieron superar el acoso bullying cuando las escuelas junto con los padres se comprometieron a resolver la situación.

Es necesario que se cambien las ideas de que en “mi escuela o colegio no ocurre el bullying”. Todavía se escucha de muchas escuelas públicas y privadas, la negación al problema. Prevenir es mejor que remediar y de surgir algún episodio, es un gran alivio tener las herramientas y tener claros los procedimientos a seguir para detener el bullying.

Compromiso y voluntad es la clave para darle garras a este problema que tiene repercusiones gigantescas para nuestra sociedad.

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martes, 7 de marzo de 2017

Ayude a sus hijos a ser aliados

Siempre recalco la importancia que tienen los que observan el bullying o acoso escolar. Ellos son los estudiantes que pueden marcar la diferencia entre al aumento o disminución de la intimidación.

Los padres son los primeros educadores de sus hijos y como tal deben guiarlos a que ellos sean aliados en estas situaciones. Para logarlo les sugiero lo siguiente:

1. Oriente a sus hijos sobre lo que es el acoso escolar.
2. Indíqueles la importancia de ser aliados de los que sufren este abuso.
3. Haga énfasis en las tres metas de involucrarse: Quitar la intensidad de la situación, apoyar a la víctima y que se asegure que ellos y los que son objeto de bullying estén a salvo.

Es sumamente importante que usted le haga saber a sus hijos sobre las consecuencias de ser aliado y defender a la víctima. Una vez sus hijos decidan involucrarse, estas son las cosas que pueden hacer:
• Enfrentar la situación. Puede detener inmediatamente la intimidación diciendo: “¡Eso no está bien!”;“¡Eso no es una broma, es cruel“ o “Voy a decirle a un adulto”.
• Ayudar a la víctima: Demostrar apoyo llevando al perjudicado a un lugar seguro, preguntar si se encuentra bien, ofreciendo posibles soluciones, acompañándolo a buscar ayuda o ayudándole a redactar el incidente.
• Buscar otros aliados: motivar  a otros para que se unan a sus hijos. Entre más sean, más fuertes serán —tres personas diciendo “¡Detente!” o tomando otras medidas apropiadas y no violentas tienen más poder que una y, tal vez, logren producir una reacción de apoyo en cadena. Piensa en lo bien que se sentirá la víctima si todo un grupo la apoya.
• Tiene que saber que puede informar un incidente. Indíqueles a sus hijos de decirle a un adulto si la víctima está siendo amenazada en persona, por cyberbullying o ambas.


En el libro bullying y la familia, se brinda mayor información sobre este tema. Siempre es positivo dirigir a los hijos para que ayuden en estas situaciones y en otras que puedan presentarse. Ellos tendrán un beneficio inmediato, que perdurará a través de toda su vida.